El Color

El color es una percepción visual que se genera en el cerebro de los humanos y otros animales al interpretar las señales nerviosas que le envían los fotorreceptores en la retina del ojo, que a su vez interpretan y distinguen las distintas longitudes de onda que captan de la parte visible del espectro electromagnético (la luz).

Todo cuerpo iluminado absorbe una parte de las ondas electromagnéticas y reflejan las restantes. Las ondas reflejadas son captadas por el ojo e interpretadas en el cerebro como distintos colores, según las longitudes de ondas correspondientes. 

El ojo humano solo percibe las longitudes de ondas cuando la iluminación es abundante. En la superposición de colores (o síntesis aditiva) el color blanco resulta de la superposición de todos los colores, mientras que el negro es la ausencia del color. En la síntesis sustractiva (mezcla de pinturas, tintes, tintas, etc), el blanco solo se da bajo la ausencia de pigmentos y utilizando un soporte de ese color y es resultado de la superposición de los colores cian, mangenta y amarillo. La luz blanca puede ser descompuesta en todos los colores por medio de un prisma. En la naturaleza esa descomposición da lugar al arco iris.

La visión es un sentido que consiste en la habilidad de detectar la luz y de interpretarla. La visión es propia de los animales teniendo estos un sistema dedicado a ella, el sistema visual. La primera parte del sistema visual se encarga de formar la imagen óptica del estímulo visual de la retina, donde sus células son las responsables de procesar la información. Las primeras en intervenir son los fotorreceptores, los cuales capturan la luz que incide sobre ellos. Los hay de dos tipos: los conos y los bastones. Otras células de la retina se encargan de transformar dicha luz en impulsos electroquímicos y en transportarlo hacia el nervio óptico. Desde allí se proyectan al cerebro, en donde se realiza el proceso de la formación de colores y reconstrucción de las distancias, movimientos y formas de los objetos observados. 

El espectro electromagnético está constituido por todos los posibles niveles de energía de la luz. Hablar de energía es equivalente a hablar de longitud de onda, por ello el espectro electromagnético abarca todas las longitudes de onda que la luz puede tener. De todo el espectro, la porción que el ser humano es capaz de percibir es muy pequeña en comparación con todas las existentes. Esta región, denominada espectro visible, comprende longitudes de onda desde 380 nm hasta los 780 nm (nanómetro), y la luz de cada una de esas longitudes de onda es percibida en el cerebro humano como un color diferente. 



Un pigmento o un tinte es un material que cambia el color de la luz que refleja debido a que selectivamente absorben ciertas ondas luminosas. La luz blanca es aproximadamente igual a  una mezcla de todo el espectro visible de la luz. Cuando esa luz se encuentra con un pigmento, algunas ondas son absorbidas por los enlaces químicos y sustituyentes del pigmento, mientras otras son reflejadas. Este nuevo espectro de luz reflejado crea la apariencia de color. 

La apariencia de los pigmentos o tintes están íntimamente ligada a la luz que reciben. La luz solar tiene una temperatura de color alta y un espectro relativamente uniforme, y es considerada un estándar para la luz blanca. La luz artificial, por su parte, tiende a tener grandes variaciones en algunas partes de su espectro, lo que tiene como resultado, que los tintes o pigmentos lucen de diferentes colores. Los tintes sirven para colorear materiales, mientras que los pigmentos sirven para cubrir una superficie, como puede ser un cuadro. Desde las glaciaciones, los humanos emplearon plantas y parte de animales para lograr tintes naturales con los que colorear sus tejidos. Luego los pintores han preparado sus propios pigmentos, y, en 1856 aparecieron los tintes sintéticos.

Se llama síntesis aditiva al obtener un color de luz determinado por la suma de otros colores. Thomas Young, partiendo del descubrimiento de Newton que la suma de los colores del espectro visible formaba luz blanca realizó un experimento con linternas de seis colores del espectro visible, proyectando estos focos y superponiéndolos llegó a un nuevo descubrimiento: para formar los seis colores del espectro solo hacen falta tres colores, y además sumando los tres se forma una luz blanca.

Los colores primarios no son una propiedad fundamental de la luz, sino un concepto biológico basado en la respuesta fisiológica del ojo humano a la luz. Un ojo humano normal solo contiene tres tipos de receptores, llamados conos. Estos responden a longitudes de onda específicas de luz roja, verde y azul. Aunque la sensibilidad máxima de los conos no se produce exáctamente en la frecuencia roja, verde y azul, son los colores que se eligen como primarios, porque con ellos es posible estimular los tres receptores de color de manera casi independiente, proporcionando un amplio gamut. Las televisiones y los monitores del ordenador son las aplicaciones prácticas más comunes de la síntesis aditiva.

Todo lo que no es color aditivo es color sustractivo. En otras palabras, todo lo que no es luz directa es luz reflejada en un objeto, la primera se basa en la síntesis aditiva del color, la segunda en la síntesis sustractiva del color.





La síntesis sustractiva explica la teoría de la mezcla de pigmentos y tintes para crear color. El color que parece que tiene un determinado objeto depende de que partes del espectro electromagnético son reflejadas por él, o dicho a la inversa, que parte del espectro son absorbidas. 

Se llama síntesis sustractiva porque a la energía de la radiación se le sustrae algo por absorción. En la síntesis sustractiva el color de partida suele ser el color actromático blanco, el que aporta la luz, es un elemento imprescindible para que las capas de color puedan poner en juego sus capacidades de absorción. En la síntesis sustractiva los colores primarios son el amarillo, el magenta y el cian, cada uno de esos colores tiene la misión de absorber un campo de radiación de cada tipo de conos. Actúan como filtros, el amarillo no deja pasar las ondas que forman el azul, el magenta no deja pasar el verde y el cian no permite pasar al rojo. La aplicación práctica de la síntesis sustractiva es la impresión en color y los cuadros de pintura.

Los ocho colores elementales corresponden a  las ocho posibilidades extremas de percepción del órgano de la vista. Las posibilidades últimas de sensibilidad de color que es capaz de captar el ojo humano. Estos resultan de las combinaciones que pueden realizar los tres tipos de conos del ojo, o las posibilidades que ofrece al combinarse los tres colores primarios. 

Aunque los dos extremos del espectro visible el rojo y el violeta, son diferentes en longitud de onda, visualmente tienen algunas similitudes, Newton propuso que la banda recta de colores espectrales se distribuyese de una forma circular, uniendo el espectro visible. Fue el intento de realizar el primer círculo cromático, un intento de fijar las similitudes y diferencias entre los distintos matices de color. 




Desde un punto de vista teórico un círculo cromático de doce colores estaría formado  por los tres colores primarios, entre ellos se situarían los tres secundarios, y entre cada secundario y primario el terciario que se origina de su unión. De modo que en actividades de síntesis adictiva se pueden distribuir los tres primarios (rojo,verde y azul) uniformemente separado en el círculo, en medio entre cada dos primarios, el secundario que forman ellos dos, entre cada primario y cada secundario se pondría el terciario que se origina en su mezcla, con lo que tendríamos un círculo cromático de síntesis adictiva de doce colores. Lo mismo vale para aquellos de síntesis sustractiva.

Cada color determinado está originado por una mezcla o combinación de diversas longitudes de onda. En cada tabla se agrupan los colores similares. A cada color se le ha asignado un matiz. El matiz es la cualidad que permite diferenciar un color de otro, permite clasificarlo en término de rojizo, verdoso, azulado, etc. Se refiere a la ligera variación que existe entre un color y el color contiguo en el círculo cromático. 

El uso de ciertos colores impacta gradualmente en el estado de ánimo de las personas, muchos de ellos son utilizados con esa intención en lugares específicos. Por ejemplo, en los restaurantes es muy común que se utilice decoración de color naranja ya que abre el apetito, en los hospitales se usan colores neutros para dar tranquilidad a los pacientes, y para las entrevistas de trabajo es recomendable llevar ropa de colores oscuros, ya que da la impresión de ser una persona responsable y dedicada, estos son algunos ejemplos de la relación entre los colores y las emociones:



  • Colores análogos: Se utilizan de manera adjunta y producen una sensación de armonía
  • Colores complementarios: Cuando son usados producen un efecto de agresividad, provocado por el máximo contraste al utilizarlos juntos
  • Colores monocromáticos: Al utilizarlos producen una sensación de unidad y estabilidad, se pueden utilizar con diferente intensidad (más claro, más oscuro), dependiendo esto último de la luz.





Comentarios

Entradas populares